1.  Todo parte con una idea💡: Ten claras tus motivaciones

Toda empresa parte con una idea y esta puede venir de varias fuentes, por ejemplo, de un deseo de emprender y crecer personalmente ganando dinero, o también porque detectaste un problema el cual piensas que puedes resolver con tu producto o servicio. También puede ser por vocación o bien porque está relacionado a tu profesión o a algo que te guste.

Existen muchas motivaciones para sacar adelante esa idea de negocio que tienes en mente, pero antes de comenzar es necesario tener una perspectiva general de los recursos necesarios para desarrollarla. Y justamente es eso lo que te traemos en este post: perspectiva.

Pon ambas en una balanza y si están equilibradas, pues ya no esperes más en comenzar. ¡Vamos allá!

2. Conoce tu producto y su composición.

Crea tu formula propia: Si quieres vender un producto procura que este tenga un elemento diferenciador, es decir: que no sea “la copia de”.

Cuando vendes o prestas un servicio, es indispensable para que tu negocio crezca, que se diferencie de los demás productos del mercado. El factor “novedad” siempre es un atractivo que lleva a las personas a elegir tu producto por sobre el resto.

Es imposible crear un producto exactamente igual a tu competencia, pues la clave de una formulación está en las cantidades más que en los propios ingredientes.

Haz un estudio de vida útil: La vida útil de tu producto se define bajo las condiciones que tu propongas. Por ejemplo, si estimas un tiempo de duración de 6 meses, se debe garantizar que ese es el tiempo mínimo que durara bajo las condiciones de almacenamiento que tu definas y las cuales estaban escritas en el packaging de tu alimento.

Realizar un estudio de vida útil en un laboratorio es sumamente caro, por lo que te recomendamos que tú mismo hagas una evaluación sensorial de tu alimento. Esto se realiza tomando varias muestras y evaluando sus características sensoriales más importantes en un tiempo determinado. El estudio terminara cuando existan cambios sensoriales visibles. Ej: si quieres producir galleta, su vida útil terminara cuando se pierda crujencia, existan olores extraños.

Ojo, ten en cuenta que el uso de aditivos te ayudara a extender la vida útil de tus productos ya que evita la proliferación de microorganismos de deterioro, por tanto, es una buena opción agregarlos para aumentar su tiempo en anaquel.

Esto último es clave, ya que, si quieres distribuir y vender por mayor, se debe garantizar un tiempo de duración aceptable para un minimarket, o supermercado, de modo que tu socio o cliente no pierda el producto porque este venció antes de venderse.

Puedes revisar algunas de estas consideraciones en el siguiente video:

3. Resolución sanitaria.

Como mencionamos en el video anterior, uno de los pasos más relevantes para tu producto /servicio de alimentos es la tan esperada resolución sanitaria.

Para conseguirla es indispensable contar con las medidas sanitarias mínimas en tu lugar de elaboración de alimentos. Aquello puedes lograrlo con la asesoría correcta.

Tales medidas pueden ser por ejemplo: Pisos y superficies (mesas y pareces) lavables, luces y y ventanas con tela mosquitera, lugares designados para almacenaje de: materias primas, utensilios de aseo; contar servicio de agua potable, emplear materias primas autorizadas, sistema de eliminación de calor, olores o vapor, sitio de eliminación de desechos, ausencia de plagas, etc.

Ya cuando tengas tu local instalado y cuentes con todas las medidas necesarias, podrás tramitar tu resolución sanitaria, presentando la documentación que solicita el ministerio de salud. Has click aquí para ver dicha documentación.